A riesgo de convertir el blog en el club oficial de Fans de Werner Herzog vamos a comentar 2 imprescindibles obras relacionadas con el maestro aleman.
Casi 10 años depués de meterse en la selva para rodar Aguirre, la cólera de Dios, Werner Herzog acometío una empresa casí imposible.
Fitzcarraldo, de Werner Herzog (1982).
Brian Sweeney Fitzgerald (Klaus Kinski) al que los "indios" llaman Fitzcarraldo (no consiguen pronunciar correctamente el apellido) es un empresario venido a menos en Perú a comienzos del siglo XX, su fortuna despareció cuando intento construir una linea ferroviaria Transandina. Desde entonces sobrevive fabricando hielo mientras sueña con construir un palacio de la ópera en medio de la selva.
La pareja de nuestro protagonista es Molly (Claudia Cardinale, que mujer señores), que decide ayudar financiando un alocado plan: Fitzgerald se convertirá en empresario del caucho explotando unos terrenos inaccesibles, pero el espíritu y la genialidad del este loco hará realidad lo imposible y para ello deberá arrastar su barco de vapor sobre una empinada colina.
La cuarta colaboración entre Herzog y Kinski no fue planeada como tal, originalmente el rodaje comenzó en Diciembre de 1980 con Jason Robards, Mick Jagger y Claudia Cardinale, en Febrero del 81 Robards enferma y lo trasladan a EEUU donde le recomiendan unos meses de reposo, ante esta situación Jagger abandona el barco (nunca mejor dicho) por problemas de agenda relacionados con la inminente gira de presentación del mítico álbum de los Stones Tattoo You.
Herzog no se acobarda y reescribe el guión eliminado el personaje de Jagger y durante un momento de locura transitoria piensa seriamente en protagonizar él mismo la película. Afortunadamente el cineasta alemán recapacita y viaja a New York donde se cita con su "enemigo" Kinski que le recibe con una botella de champán gritándole: Sabía que yo sería Fitzcarraldo, lo supe desde el principio y tu también!!!.
Una vez embarcado el astro aleman, el rodaje de Fitzcarraldo se convertiría en una autentica aventura de la que ya hablaré mas tarde.
Personalmente considero a Fitzcarraldo como la versión positiva o menos siniestra de Aguirre la cólera de Dios, las dos tratan de la obsesión enfermiza pero Brian Sweeny Fitzgerald en un loco genial que se enfrenta a la dura realidad sin importarle perder su (escasa) fortuna o convertirse en el hazmerreir local. El magnetismo del protagonista es tal que cuando comienzan los trabajos para arrastar el barco colina arriba uno no puede evitar "empujar" el navío para echar una mano en la arriesgada empresa. Dichas escenas fueron rodadas sin efectos especiales pues Herzog quería convencer al espectador que tal cosa era real, no un vulgar truco óptico "made in Hollywood". Una escena que hoy en día ningún productor en su sano juicio permitiría rodar si no es con CGI.
A partir de este Fitzcarraldo la carrera de Herzog comenzaría una época errática, mas volcada en los documentales pero que todavía capaz de producir buenos momentos cinematográficos.
La cuarta colaboración entre Herzog y Kinski no fue planeada como tal, originalmente el rodaje comenzó en Diciembre de 1980 con Jason Robards, Mick Jagger y Claudia Cardinale, en Febrero del 81 Robards enferma y lo trasladan a EEUU donde le recomiendan unos meses de reposo, ante esta situación Jagger abandona el barco (nunca mejor dicho) por problemas de agenda relacionados con la inminente gira de presentación del mítico álbum de los Stones Tattoo You.
Herzog no se acobarda y reescribe el guión eliminado el personaje de Jagger y durante un momento de locura transitoria piensa seriamente en protagonizar él mismo la película. Afortunadamente el cineasta alemán recapacita y viaja a New York donde se cita con su "enemigo" Kinski que le recibe con una botella de champán gritándole: Sabía que yo sería Fitzcarraldo, lo supe desde el principio y tu también!!!.
Una vez embarcado el astro aleman, el rodaje de Fitzcarraldo se convertiría en una autentica aventura de la que ya hablaré mas tarde.
Personalmente considero a Fitzcarraldo como la versión positiva o menos siniestra de Aguirre la cólera de Dios, las dos tratan de la obsesión enfermiza pero Brian Sweeny Fitzgerald en un loco genial que se enfrenta a la dura realidad sin importarle perder su (escasa) fortuna o convertirse en el hazmerreir local. El magnetismo del protagonista es tal que cuando comienzan los trabajos para arrastar el barco colina arriba uno no puede evitar "empujar" el navío para echar una mano en la arriesgada empresa. Dichas escenas fueron rodadas sin efectos especiales pues Herzog quería convencer al espectador que tal cosa era real, no un vulgar truco óptico "made in Hollywood". Una escena que hoy en día ningún productor en su sano juicio permitiría rodar si no es con CGI.
A partir de este Fitzcarraldo la carrera de Herzog comenzaría una época errática, mas volcada en los documentales pero que todavía capaz de producir buenos momentos cinematográficos.
Burden of Dreams, de Les Blank (1982).
Werner Herzog se iba a embarcar en un rodaje que se extendería casi dos años, afortunadamente el documentalista Les Blank estaba allí con su equipo para inmortalizar una de las últimas aventuras cinematográficas.
Durante unos escasos 95 minutos Blank muestra los momentos mas intensos del rodaje de Fitzcarraldo, convirtiendo este documental en un complemento imprescindible para entender y vivir plenamente la "experiencia" Fitzcarraldo.
Curiosamente el explosivo carácter del divo alemán Klaus Kinski no se convirtió en la habitual fuente de problemas que sus erupciones de furia convertían en algo corriente (pero tampoco es que estuviera tranquilo), un rodaje en el que se incluyen prostitutas como parte del equipo no puede ser normal.... ¿o si?.
Durante el metraje vemos un poco del material rodado con Jason Robards y Mick Jagger, como el cámara Thomas Mauch casi pierde la mano, la historia del trabajador que se amputó un pie con una sierra mecánica al ser mordido por una serpiente, conflictos con los indios, con políticos y con guerrilleros, y a todo esto hay que sumar las dificultades de rodar en el corazón de la jungla peruana con todos los problemas que conlleva: climatológia adversa, escasez de suministros, inseguridad en un ambiente hostil, unos extras indígenas que se ofrecen para asesinar a la estrella principal (Kinski, como no), etc...
Durante el rodaje Herzog escribió un diario con una letra casi microscópica que ha sido publicado en España hace poco y que se titula Conquista de lo Inútil.
Lo recomiendo efusivamente a todos aquellos interesados en el cine de Herzog y/o en rodajes cinematográficos.
Y por una temporada dejo de dar la vara con Herzog.
4 comentarios:
Mil felicitaciones, Kinski, por este post que te has currado sobre el tormentoso rodaje de "Fitzcarraldo" y gracias por estas curiosas imágenes del proyecto inicial con Jason Robards y Mick Jagger. Desde luego Kinski ofrece lo mejor de sí mismo en esta película pero más de una vez me había preguntado como hubiera sido el resultado con los actores originales. Por cierto que me he comprado el libro de Herzog y pienso empezarlo muy pronto. Saludos. Borgo.
Pues currate algo sobre el libro de marras (que jeta tengo), yo no lo he comprado por que no se que rollo se gasta Herzog en el libro y los 24 euros de momento me tiran pa'tras.
Gracias por tu felicitación.
Imposible conseguir "la conquista de lo inútil", debe estar agotado... alguien sabe cómo conseguirlo? (versión electrónica o como sea)
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